¿relaciones?

Escenario 1

Te vas sin irte por completo y regresas sin volver; ¿por qué no puedo parar este desesperante juego tuyo de estar y no estar? Al final, sólo puedo caminar en círculos.

Tengo deseos de pedirte que te vayas, que te alejes definitivamente y no enciendas la vaga esperanza de que sucederá, pero no puedo, porque en realidad no estás.

Tampoco puedo pedirte que te quedes, que lo intentes, que te atrevas, porque seguramente responderás que estás aquí a mi lado. Y en el fondo, no puedo decir que mientes porque estás, aunque nunca te encuentre…

Lo cierto es que no tengo fuerza para prescindir de ti.

Escenario 2

Te creo, irremediablemente, aunque sé que mientes… pero no quiero descifrar ni descubrir. Me he cansado de intentar ser todo y creo que el fracaso es justo ese intento, porque soy, pero sólo parcialmente, sólo al interior, sólo entre nosotros.

A veces quisiera comprender un poco más tu presencia en mi vida, a veces quisiera comprender un poco menos tu inminente búsqueda de la salida.

Para ser pasajero ha sido demasiado largo, para ser permanente, demasiado efímero… y al final el problema es que me importa, aunque no debiera.

Conclusión
A la larga, siempre llego al mismo sitio, el lugar más seguro es dentro de mí...