diciembre 23, 2005

distancias

Hay días en que no puedo tocarlo, se desvanece en sus nostalgias, se pierde entre quimeras, huye tras el humo de su cigarro. Permanece inmóvil, lejano, ausente...

A veces me pregunto cuál será la mejor forma de llegar hasta su centro, pero otras tantas, quisiera cerrar la puerta tras de mí, para no hundirme en su soledad.

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